Como consecuencia del aumento en los precios del petróleo en el mercado internacional, que superó los 120 dólares el barril este año, el precio de la gasolina en Estados Unidos subió, en promedio, 82.82% en lo que va del 2022.

En la Unión Americana, el precio del galón de gasolina, 3.8 litros, pasó de los 2.28 dólares al empezar este año, a 4.867 dólares y a eso hay que añadirle otros impuestos que llevan el energético a niveles de 6.6 dólares en algunos estados.

En ese periodo, el precio del referencial petrolero estadounidense West Texas Intermediate (WTI) acumula un incremento de 60.44%, para venderse en 120.67 dólares el barril, mientras que el europeo Brent del mar del Norte tiene un aumento de 58.83% en 2022 y se comercializa en 122 dólares la unidad.
Por su parte, la mezcla mexicana acumula una ganancia de 61.59% en lo que va de 2022, cotizando el barril en 115.20 dólares al barril al cierre del viernes 10 de junio.

Sin embargo, el precio varía en distintos estados de la Unión Americana, siendo California donde el precio del combustible es el más alto, ya que se comercializa el galón en 6.6 dólares.

De acuerdo con la Agencia Internacional de Energía (AIE) el promedio de un galón en Estados Unidos es de 4.86 dólares, esto es 59 centavos más que hace un mes y 1.81 dólares más que hace un año.

Los estados que más han aumentado el precio del energético fueron Michigan (45 centavos), Illinois (41 centavos) y Wisconsin (39 centavos).

Sin embargo, los cuatro mercados en los que la gasolina cuesta más son California (US6.34), Nevada (US5.49), Hawái (US5.47), Washington (US5.40). En Texas el galón cotiza en 4.664 dólares, siendo este último uno de los 10 estados en donde menos cuesta.

Incremento desigual

Según datos de la AIE, son diversos elementos los que se suman al precio del petróleo e impulsan el valor del energético ante los consumidores finales. Destaca, por ejemplo, que el 56% del precio de la gasolina se destina a pagar el costo del petróleo, mientras que otro 15% es utilizado para cubrir impuestos, 16% es el costo de distribución y mercadotecnia y el 14% restante es el precio de la refinación del crudo.

Lo anterior representa el diferencial entre el incremento del precio de la gasolina en Estados Unidos que este año ha subido 82.82%, mientras que el barril de petróleo ha presentado un incremento del 62% en promedio.

Además, en el mercado estadounidense el gobierno federal no controla el precio del hidrocarburo como sucede en otras naciones productoras.

Otro dato que ayudó a que el precio del energético subiera la semana pasada, de acuerdo con la AIE, es que la existencia total de gasolina en Estados Unidos se redujo 700,000 barriles, para llegar a 219 millones de barriles.

Mientras tanto, de acuerdo con los datos oficiales, la demanda de gasolina subió de 8.8 millones de barriles diarios del combustible a 8.98 millones, porque los viajeros se disponían a viajar el 30 de mayo, Día de los Caídos, fecha que marca el inicio de la temporada de verano en Estados Unidos.
Junto con la volatilidad de los precios del petróleo es probable que los precios de las bombas se mantengan elevados mientras la demanda crezca y la oferta siga siendo escasa”, escribió la AIE.

Armando Rodríguez, director general de Signum Research, explicó que la relación entre la materia prima y el combustible ya refinado “no es necesariamente de 1 a 1, es decir, no porque el petróleo suba 5%, la gasolina subirá en la misma proporción”.

Dijo que esto se debe a que en el precio de la gasolina influyen otros factores como el proceso de refinación, así como el transporte a las estaciones de servicio. “Lo mismo ocurre en el caso de la turbosina”, agregó.

Jacobo Rodríguez, director de Análisis Económico en Black Wallstreet Capital, coincidió en que los niveles récord que está registrando la gasolina se explica “por la transportación que requiere el energético, porque en Estados Unidos depende mucho de qué tan fácil es llevarla de un lugar a otro”.

Oferta y demanda

Alejandro Saldaña, economista en jefe de Banco Ve Por Más, aseguró que el aumento del precio de la gasolina se debe un “desbalance entre la oferta y la demanda”.

“Tras la depresión de 2020 por la pandemia del Covid-19, la producción no ha logrado ponerse al corriente con la fuerte recuperación en la demanda por energéticos, dada la normalización en la movilidad social y el repunte en el consumo y la actividad industrial”, aseguró.

El pasado viernes, se dio a conocer que la inflación en Estados Unidos durante mayo fue la más alta en 40 años, con una tasa anual de 8.6%. El aumento de los precios de los energéticos -en particular de la gasolina- fue uno de los principales segmentos que impulsaron al alza la tasa general de inflación.

 

Fuente: El Economista
13/06/2022