La inversión destinada a exploración hidrocarburífera, que permita encontrar nuevos yacimientos de crudo o gas natural en los lotes adjudicados en contrato ley, apenas alcanzó a US$ 2.2 millones, cifra que significó una caída del 96.2 % en comparación con los US$ 61.1 millones invertidos en todo el 2021.

Como reflejo de esa escasa inversión, en el 2022 las empresas no perforaron un solo pozo exploratorio, pese a tener compromisos de inversión para buscar nuevas reservas; pero en cambio, perforaron siete pozos de desarrollo (para mantener o aumentar producción).

Posibles motivos

Para Carlos Gonzales, director gerente de Enerconsult, uno de los factores que explican la baja inversión para explorar es que (de los 31 contratos por hidrocarburos que tiene el Perú), solo seis son para exploración, pero dos de ellos se encuetran suspendidos, en condición de fuerza mayor.

Además de esos seis contratos vigentes, dos comprenden lotes que se ubican en la costa norte, tres en el mar y solo uno en la selva central, pero ninguno se encuentra en la selvasur, a pesar de que esta última región -además de los lotes de Camisea- contiene grandes reservas de gas natural.

Dato

El año pasado se registró inversiones totales en hidrocarburos por US$ 325.7 millones, lo que significó un incremento de 32.6% frente a la realizada el 20211.

La mayor parte de lo invertido se explicó por el gasto de las empresas del ramo en mantener o incrementar producción. De hecho, la inversión en el ámbito de explotación, que fue de US$ 323 millones, representó un incremento de 75% frente a los US$ 1184.5 millones del 2021.

Fuente: Gestión
02/05/2023